Nuevamente sonrientes
A los seis años, el día del cumpleaños volvió a ser feliz. Karin estaba mejor y ellos ya lucían radiantes nuevamente. Fue una buena noticia para los niños y para la familia en general. Sus vidas estaban siendo felices, tenían amigos en el colegio y disfrutaban de pasar tiempo en la escuela.Los hermanos compartían un vínculo especial y se tenían mucho cariño el uno al otro. Era momento para realizar una enorme celebración. Posaron a la cámara riendo y disfrutando, sosteniendo su cartel de cumpleaños. Pero no faltaba tanto para el gran giro de sus vidas.