Escucha música o lee algo que te guste
Encuentra un hobby que te de satisfacción. Como sugerencia, puede ser leer un libro, escuchar música, mirar televisión, salir a caminar o jugar a las cartas. Haz actividades que te den placer y te relajen o te diviertan tanto que te hagan destornillar de risa. Es divertido, te saca la mente de los problemas y se te pasan las horas sin que te des cuenta. De adultos no es común que lhagamos actividades lúdicas o de juego, sin embargo de niños jugábamos todo el tiempo. El juego, la diversión y el entretenimiento son una parte muy importante en la vida y que luego sin darnos cuenta, llegamos a descuidar. Busquemos al niño que tenemos dentro y atendamos sus necesidades.